garbanzos con onzo que me saben a Caramel

Por desgracia, ocho días después del final del rodaje, tuvimos que revivir unos acontecimientos dramáticos. Entonces tuve un sentimiento de culpabilidad muy fuerte: ¿qué pintaba esa película que habla de mujeres, del amor y de la amistad? Para mí, el cine debería tener una misión y ayudar a cambiar las cosas, pero ¿qué podía aportar o cambiar mi película? Estuve tentada de abandonarlo todo, pero al final me dije que CARAMEL es una forma de sobrevivir a la guerra, de superarla, de ganarla. Es mi revuelta personal y mi compromiso, así que, si tuviera que escribir esta película hoy día, la haría igual.
A veces relacionamos las cosas de forma rara. Sin sentido aparente, nuestra mente asocia buscando en el sentir más oculto, como esa publicidad subliminal que tanto se le ha atribuido a los de coca cola en las películas más taquilleras del momento...

De ese mismo modo, yo he asociado la película Caramel a los garbanzos. Absurdo, verdad? ¡mira que lo tenía fácil! anda qué no está rico el caramelo y anda qué no se hacen cosas ricas con él. La película empieza con una serie de planos cortos y maravillosos de un cazo en el que se cuece caramelo... evidentemente, en ese momento del film, aún no había puesto en remojo mis garbanzos...

Caramel es una película de Nadine Labaki, una mujer libanesa preciosísima que siempre quiso ser cineasta. Cuando terminó la guerra del Líbano -entonces Nadine tenía 17 años- decidió que haría cine que hablara de un futuro esperanzador y no de un pasado tan doloroso. La casualidad -o el destino- quiso que el estreno de la película coincidiera con el comienzo de la guerra entre Israel y el Líbano en el 2006. En un primero momento, para aquellos que no la hubieran visto, puede que Caramel resultara demasiado romántica en un momento tan trágico con un fondo político complejo y desastroso... pero, puede que sin quererlo, Nadine sembró esa semilla de esperanza, donde las distintas culturas, tradiciones y religiones del Próximo Oriente puedan coexistir en paz...
Creo que la guerra sigue siendo cosa de hombres y reparar los daños que causan suele ser cosas de mujeres. Nuestras hormonas están preparadas para amar, curar y perdonar y las hormonas masculinas para conquistar, proteger y pendenciar. A las guerras las curan las mujeres. A pesar del maltrato físico, psíquico y sexual que reciben las mujeres miran al futuro y se las apañan como pueden... sobreviven gracias a los lazos de amistad y amor que se refuerzan ante las inclemencias...

En Caramel no hay ni una sola referencia política o social. Describe el día a día de 5 mujeres unidas por la amistad y con el amor de por medio haciendo de las suyas. El punto de encuentro, un salón de belleza donde se aplica la depilación al caramelo, una técnica muy común en Medio Oriente que consiste en hacer un caramelo con azúcar, agua y limón, y se deja enfriar hasta conseguir una pasta templada que se extiende sobre la piel igual que la cera... un acto en el que las mujeres llegamos peludas, nos desnudamos ante una desconocida y nos dejamos hacer. A veces nos quemamos la piel y siempre, salimos con el pellejo dolorido e irritado y los ojos húmedos por esos lagrimones involuntarios que se escapan en cada tirón... 5 mujeres de diferentes religiones y tradiciones encuentran su punto de apoyo y de felicidad en el salón. Las protagonistas no son actrices profesionales. Nadine las descubrió por la calle o a través de amigos. No quería que actuaran sino que se dejaran llevar. No las impuso el guión sino que las animó a improvisar. Son mujeres reales que detrás de su papel en la película esconden la realidad del Líbano. Una mujer chií casada a la fuerza a los 13 años que ha logrado vivir "sola", encarna el papel de la mujer misteriosa -requeteguapa y perfecta- que acude al salón a lavarse el pelo y que vive con Rima su especial historia de amor entre champú y champú... mujeres todas ellas que en la vida real y en la ficticia viven superando tabús y sus remordimientos y salen adelante como pueden, pero siempre apoyándose las unas en las otras:-)

Pero en el film hay además unos personajes masculinos sublimes. Un policía enamorado a rabiar de Layal, la dueña del salón de belleza que interpreta Nadine. Un día se decide a entrar en el salón y se deja hacer. Con cierta guasilla, deciden que su entrecejo está demasiado poblado. A la que aplican el caramelo y tiran de él, una lágrima cae sin querer de sus ojos que transmiten una ternura indescriptible. Charles, un apuesto caballero francés, entrado en años y enamorado de Rose, una solterona de 65 años que ha consagrado su vida a cuidar de su hermana mayor demente. Rose deja pasar, quizás por última vez, el amor por su puerta porque en ciertos países, el amor tiene su momento y cuando una viuda o solterona de edad dan rienda suelta a sus sentimientos se convierten en el hazmerreír de los vecinos y en la vergüenza de los allegados...
Historias que a mí me han despertado el deseo de comer garbanzos. Bien amarillos de azafrán y cúrcuma con tropezones de lo que haya en el frigo, que con cualquier cosa se apañan. Lo importante, es acompañarlos bien -yo lo he hecho con orzo, una pasta típica del Medio Oriente, Grecia e Italia-. Si hubiera estado en Almería, lo hubiera hecho con gurullos y puede que hubieran llevado sabor marinero. Pero como estoy en Leoben, los acompañé de pollo, chorizo y unos taquitos de jamón... jamón y chorizo campofrío que en el super nos hacen de vez en cuando las semanas españolas y aprovecho cual posesa.

Pero lo importante, son los garbanzos, cocidos previamente en agua con una cebolla cortada en cuartos, 2 dientes de ajo enteros y con piel, un par de hojas de laurel, una zanahoria y un par de huesos. Para que los garbanzos tengan carácter, van en una salsa de pimientos con tomate. Un placer que me trae sentimientos cálidos y recogidos. Me sabe a la seguridad de la mesa materna o a la cuchara de la abuela... estos garbanzos me llegan al alma y es posible que sea esta la causa de que, por una vez, el dulce lo haya guardado para las pantorrillas...


Ingredientes para 4 con posibilidad de repetir:

  • 400gr. de garbanzos cocidos
  • un puñadito de orzo por comensal (como si fuera arroz)
  • 1 pimiento seco
  • 2 pimientos asados
  • 2 tomates asados
  • 1 cebolla mediana
  • 2 dientes de ajo
  • 2 cucharadas de salsa de tomate o 1 de tomate concentrado
  • 1/2 litro de caldo
  • un buen puñado de tropezones (carne, pescado, marisco o embutidos. Al gusto de cada nevera)
  • un par de hebras de azafrán
  • 1/2 cucharadita de cúrcuma
  • 1/2 cucharadita de comino molido
  • sal
  • un chorrito de aceite de oliva


Preparación:
Asa los pimientos y los tomates en el horno a 200ºC unos 15 minutos. Dejarlos enfriar tapados con papel de aluminio. Pon también el pimiento seco y así lo rehidratarás con los propios jugos de los recién asados. Péla y tritúralos levemente con una trituradora eléctrica -o una batidora tipo minipimer- junto con los ajos y el azafrán . Mojar esta pasta con el jugo que hayan soltado los pimientos asados. Reservarlos. En una cacerola o sartén con fondo, pon un poco de aceite de oliva y saltea la cebolla cortada en trocitos muy finos. Rehoga los tropezones y añade la pasta de pimiento y tomate. Añade el caldo, el tomate concentrado, la cúrcuma, el comino y rectifica de sal. Añade la pasta y deja que cueza a fuego moderado hasta consumir el caldo. El aspecto es parecido al del arroz caldoso y los tiempos de cocción son más o menos similares. Si ves que se seca demasiado, añade un poquito de agua caliente siempre que lo consideres oportuno...

Si te ha gustado, comparte o imprime:

22 comentarios

  1. Me has intrigado con la película lo primero, que no sé si podré encontrar fácilmente por aquí o no pero empezaré por buscarla en la biblio a ver si hay suerte. Y me encanta para una historia (bueno, historias) tal y como nos cuentas un plato así de reconfortante, tan mediterraneo.
    Apuntados recomendación y receta.
    Besos.

    ResponderEliminar
  2. Yo he visto Caramel. La vi en el cine, entré si saber muy bién qué iba a ver, me atrajo por si sola, y fué genial, me encantó. Gracias por recordarmela, me han venido ganas de volverla a ver.
    Estos garbanzos se ven sublimes, que ricos!
    Muchas gracias!!!! Un fuerte abrazo!

    ResponderEliminar
  3. Se ven deliciosos tus garbanzos y ... qué historia tan preciosa...gracias

    ResponderEliminar
  4. mmmm... garbancitos con tantas especias, ¡qué rico!

    no he visto la peli, me has dado ganas de verla.

    ResponderEliminar
  5. Ooooh, me encanta! No me atrevo a prepararlo ahora con el calorazo madrileño, pero en cuanto pueda lo haré. Tengo muchas ganas de probar el orzo.
    También de ver la peli, me has recordado que tengo que verla. :)
    B*

    ResponderEliminar
  6. nunca vi la peli, y con estos garbanzos que ya me estoy llevando, seguro que cuando vea la película en cuestión me será difícil no asociarla a tu receta :)

    ResponderEliminar
  7. ¿Te puedes ceer que esta mañana tenía unas ganas tremendas de cocinar garbanzos pero no he conseguido inspirarme?
    Bueno, al menos ya sé lo que voy a hacer mañana, no tengo orzo, pero seguro que unos fideos de fideuá no quedarán mal.
    No he visto la peli, pero tiene muy buena pinta, a ver si la encuentro.
    Un besazo.

    ResponderEliminar
  8. Hola Marhya!
    La película creo que te gustará fijo. Tiene una luz y una ambientación maravillosa:-)
    Besos


    Hola Gemma!
    si? verdad que es muy especial? recuerdas a la hermana de Rose, esa anciana que buscaba cartas por todos lados? Nadine se basó en la historia de una conocida que de joven se enamoró de un soldado francés con el que se carteaba a diario. Sus cartas nunca tenían respuesta porque su familia las interceptó y ella, al saberlo enloqueció. La mujer vivió toda su vida buscando desesperada esas cartas de amor...
    Besos


    Hola Mary!
    Muchas gracias y un achuchón:-)
    Besos


    Hola Ajonjoli!
    pues si tienes oportunidad de verla seguro que te gusta:-)
    Besos


    Hola Epa!
    jajaja, sí, habrá que esperar a que refresque. Hecho a la marinera fijo que es una forma estupenda de recibir al otoño... cunado llegue, que a vosotros aún os queda;-P
    Besos


    Hola Sole!
    Eso me temo, que en lugar de pensar en un flan de caramelo no podrás quitarte la imagen de mi plato de garbanzos :-D
    Besos


    hola Lola!
    jajajaja! eso me pasa en verano. Nos gustan mucho los garbanzos y me canso de comerlos siempre en ensalada así que busco nuevas formas de comerlos sin que nos de un soponcio. como le decía a Epa, a la marinera tienen que estar para morirse... por cierto, en Murcia también son típicos los gurullos? el orzo me los recordó mucho:-)
    Besos

    ResponderEliminar
  9. No he visto la película, me la pongo en pendientes!!
    Ease guiso con garbanzos, divino!!! me encantan las legumbres. Yo sí que lo haré con gurullos, tebgo dos paquetesde Almería!
    Besicos, un poco sudados...

    ResponderEliminar
  10. Una entrada preciosa. Me han entrado ganas de ver la peli y de comer esos garbanzos tan ricos. Besines desde unas vacaciones un tanto vagas, al menos culinariamente hablando :D

    ResponderEliminar
  11. Pues le pegan mucho los garbanzos... sobre todo por lo qeu a mujer se refiere. Los garbanzos son como bien dices puchero de abuela, guiso de madre y siempre reconfortan, como esas historias que nos cuentas tan bien.
    Un besoteeeee

    ResponderEliminar
  12. Tengo ganas de comer garbanzos, creo que lo asocio al fresco y como estoy tan cansada de calor pues.... Tu receta me gusta y mucho y tu entrada hablando de la peli me ha dejado colgadita, ahora quiero verla. La buscaré.
    Un beso grande

    ResponderEliminar
  13. Ay, Mai, una vez más has sabido transmitir tan bien a través de tus palabras y tus fotos, que entre párrafo y párrafo no sabía si ponerme a buscar esa peli o a cocer garbanzos. Mira, lo que he pensado es anotar las dos cosas como pendientes. Y las dos cosas las dejo para un día lluvioso: que hoy, por fin, ha salido el sol con ganas :)
    Pero caerán, sin duda.
    Muuuuak

    ResponderEliminar
  14. Ese plato de garbanzos me parece delicioso. No he probado esa pasta chiquitina, pero promete junto con los garbanzos... No obstante, lo que me ha encantado es tu visión de Caramel. Sabes que me encantó cuando la vi hace un par de años???. No sabía que la directora de la peli fuese la dueña de la peluquería. Esa clase de pelis son las que más me emocionan, lloro como una tonta... pero a moco tendido!. Gracias por recordármela.
    Un besoteeeeeeeee

    ResponderEliminar
  15. Hola MaryLou!
    Ahhhh qué suerte! el sabor del orzo es parecido aunque la textura de los gurullos me gusta mucho más:-)
    Besos


    Hola Evgar!
    pues muy bien hecho entonces porque las vacaciones son para perrear a placer:-P
    Besos


    Hola Charrita!
    verdad? eso mismo! puchero de abuela y guiso de madre... ese es el sentimiento de recogimiento y protección:-)
    Besos


    Hola Chelo!
    jajaja! eso es porque los asocias al cocido:-D dí que sí, cada cosa en su momento:-)
    Besos


    Hola Anita!
    Vaya veranito que tenemos tronqui! en la ORF dijeron que era el verano con menos horas de sol en 11 años... me cachis!
    Besos


    Hola Laura!
    verdad que transmite mucho? la luz, la música.. y ellas, todas muy especiales:-) hubo un par de detallines que también me emocionaron mucho y ese final, en la calle, con la melena cortada... muy esperanzador, verdad?!
    Besos

    ResponderEliminar
  16. No he visto la película, pero con tu descripción y este plato tan rico, me han entrado ganas! Y de comer garbanzos también! JaJa. Bss

    ResponderEliminar
  17. Hoooola...anda que no me comía un buen plato de garbanzos...oye el orzo que es???
    La pelicula no la he visto pero a la vuelta miraré si la encuentro...ç
    muuuaaaaa

    ResponderEliminar
  18. que rico plato. Unos garbanzos como esos me comia yo. Bss.

    ResponderEliminar
  19. Una delicia Maite! Yo adoro los garbanzos. La pasta èsta aqui la llaman "risone" porque se asemejan a los granos del arroz. Los vi y comi tambien en Grecia donde son muy populares. Espero que estes pasando un lindo verano. Un besote. Sil

    ResponderEliminar
  20. Es la primera vez que visito tu casa y he de decir que me encanta, que me quedo porque tus historias enganchan y esos garbanzos...¡Ay, esos garbanzos! Cuando bajen las temperaturas, caen. Saludos.

    ResponderEliminar
  21. Hola, Maite!!! He conocido tu blog a través de Lola, y me ha encantado!!! Enhorabuena!!!! Me verás más veces por aquí, eso seguro ;-)
    Vi Caramel en el cine, hace unos años y me pareció una verdadera joyita!!! La disfruté muchísimo!
    En cuanto a los garbanzos, se ven de lujo. Una forma curiosa de prepararlos :-)
    Encantada de conocerte!
    Un beso desde Estocolmo!

    ResponderEliminar
  22. Hola Lydia!
    jajaja! empatía cybernética:-D
    Besos


    Hola Núria!
    El orzo es una pasta que tiene una forma que parecen granos de arroz. Como dice Sil, en italina lo llaman risone. Te gustaría mucho, tanto el orzo como la película:-)
    Besos


    Hola Luisa!
    jajaja! verdad?
    Besos


    Hola Sil!
    cómo estás! prometo escribirte pronto y te cuento:-)
    Besos


    Hola Pilar!
    Bienvenida!!! cuando quieras ya ves donde me tienes:-) pa'loquesea!
    Besos


    Hola Elena!
    Ay mi Lolica! ni te imaginas lo encantadora que es:-) verdad que sí? que es una película de esas que gusta ternerlas cerca y verlas de vez en cuando ... bien bonita! desde Estocolmo!!!!! buenooo, eso suena bien "exótico" :-)
    Besos

    ResponderEliminar

 
Copyright © Hierbas y especias. Diseñado con por Las Cosas de Maite